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La noche del miércoles al jueves, como diría Rambo, "...fue un infierno", que me dejó tumbado en la cama, hecho polvo, y totalmente deshidratado el día de ayer. Quedé condenado a una tostadita con pavo para desayunar, a un arrocito hervido para comer y una manzanita para cenar. Pero tuve el cuerpo totalmente molido, y estuve todo el jueves en cama (aunque, insospechadamente, he dormido toda la noche).
Ayer noche, en un Palau Sant Jordi a reventar, Joan Manuel Serrat dio su último concierto en Barcelona, en el marco de su gira de despedida (El vici de cantar).Ese mismo Joan Manuel Serrat al que yo, con apenas 9 años perseguía por la acera de la calle Caspe, a la salida Radio Barcelona, del programa Radio-Scop de Salvador Escamilla (para quien tuvo un recuerdo especial al acabar el concierto). Ese día, lo recuerdo como si fuera ahora, nos cantó en el estudio "Sota un cirerer florit").
Dentro de un par de horas voy a probar -por segunda y última vez, si no me funciona- una infiltración de hialurónico en la rodilla.
Americana y pantalón (o traje completo). camisa y corbata
Venga, vamoooos!