...he podido volver a calzarme un dorsal.
La última vez fue en Jean Bouin, ya con la rodilla dando por donde amargan los pepinos. Desde entonces y hasta hoy, he hecho escarceos, acompañamientos... pero inscripción en cursa no lo había vuelto a hacer desde el 24 de noviembre en Jean Bouin (para colmo, y por no mirar agenda antes, el día anterior corrí la Badatrail; bueno, lo del correr es un decir, porque en el km 2,5 tuve que dejarlo por la rodilla de marras para no echar a perder la J.B.)
Y el dolor sigue ahí, pero se sobrelleva corriendo, no empeora. Pero no cesa...
Voy a probar a seguir corriendo, casi a diario si puedo... pero está claro que la cosa va para largo. Y además, y gracias a este largo período de casi inactividad, están los casi 4 kilos de más que llevo en la mochila delantera, que van a costar lo suyo de soltar...
Ayer ya tuve un "tastet" (corrí 6 km a ritmo suave con Arcadi Alibés, Joan y Carolina antes de meternos entre pecho y espalda un conejo en escabeche).
Pero hoy he corrido una cursa de nuevo, y de nuevo he vuelto a sentirme feliz: el ambiente; la previa; los amigos vistos ya con pantalón corto otra vez, pero de igual a igual; colocarme en el cajón de salida; la cuenta atrás antes del disparo de salida; salir -esta vez sí- sin parecer una cabra loca; perpetrar los pequeños retos en carrera ("... venga Txabi, a por ese") y luchar por conseguirlos, por alcanzarlos; divisar allá a lo lejos el arco de llegada, la alfombra de meta... y hacer lo imposible para que JJVico no reflejara en sus fotos la cara de lo muy hecho polvo que estaba.
Txabi returns... aunque creo que de momento, y por una buena temporada hasta que vuelva a coger la forma, me quedaré en la categoría 5k; y ya veremos si esto mío no va a acabar siendo una nueva versión de la cancioncita aquella de "...un pasito p'alante, un pasito p'atrás".
