03 marzo 2019

1-2, 1-2, probando, probando...



Eso es, exactamente, lo que he hecho esta mañana. Probarme.
Después del trompazo del jueves en moto, quería ver qué tal andaba mi cuerpo para correr unos kilometritos. Porque no sabes si te duele algo al correr... hasta que corres.
Así que en la UNIRUN 2019 que me he plantado esta mañana, con el disfraz de corredor ya puesto; toda una declaración de intenciones.
He corrido cuatro kilómetros “a ritmo actual” (5:05-5:15) y luego me he dedicado a ir parándome para grabar, GoPro en mano, a los corredores de la mitad al final. Hoy el tiempo del crono me traía absolutamente sin cuidado.
No he notado ninguna molestia provocada por el accidente. Prueba superada.
Próxima parada: lo que buenamente pueda correr en la MARATÓ BARCELONA con Egoísmo Positivo...