CURIOSIDADES:
La amarilla, del Camino Portugués, tiene historia propia. Es la gorra que me olvidé desayunando en la pasteleria-degustación de Caldas de Rei y que -con una generosidad extrema- me llevó hasta mi albergue en Padrón la deliciosa Vanessa (se desplazó, la tarde de un domingo, 34 kilómetros solo para esto).
De la gorra del trayecto "Finisterre - Santiago" sólo ha habido una, y es que tanto el logo, el hashtag, como la estampación fueron ideados a posteriori (una vez ya en casa) pues fue un recorrido no previsto con anterioridad. Es la única gorra que no tiene una "hermana" más allá.
Falta incluir 2 fotos de "gorras viajeras". Cuando me lleguen, actualizaré imagen.